25 de agosto de 2008

Ligeros de equipaje

Lo importante de cada viaje, muchas veces, es aquello que te traes. No sólo los recuerdos físicos (figuritas, souvenirs, fotos), sino las impresiones que te quedan grabadas en la memoria, a menudo para siempre.
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Pero también es importante lo que te llevas, o sea, el equipaje. Y para este asunto, como para tantos otros, hay gente para todo. Personas que hacen una lista detallada; personas que "necesitan" tener la maleta abierta semanas antes para ir metiendo, sacando, volviendo a meter; personas que hagan lo que hagan siempre se olvidan el pijama y el cepillo de dientes...
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Debo reconocer que yo soy de los que sólo se preocupan por los billetes (de avión y de moneda), y poco más. Aún así, y quizás por la despreocupación, al final acabo metiendo de todo en la maleta, cosas que ni siquiera utilizo.
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Sin embargo, en esta ocasión, el equipaje es un tema fundamental. Incluso hay debates en Internet del tipo maleta o mochila. No hay duda posible. A Vietnam, si no vas con viaje organizado, necesitas mochila. Las maletas, llevándolas por tu cuenta, no son útiles para nada. El caos de las ciudades, las aceras con obstáculos contínuos, los traslados inacabables, hacen que esa opción tengas que descartarla. Una maleta te deja "manco", la acabas "abandonando" y alguien te la roba. Una mochila es una parte más de tu cuerpo, te deja las manos libres y te olvidas de ella (siempre pegada a tu espalda)
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Pero escribo esto porque pensando en la mochila, no puedo evitar pensar que somos incapaces de viajar ligeros de equipaje. ¿no será la maleta un símbolo de nuestra obsesión por acumular cosas? ¿de verdad nos vamos a alguna parte, por muy lejos que nos desplacemos, si nos llevamos todo lo nuestro encima? Quizás esté exagerando, pero cada vez que estoy en un aeropuerto, una estación de tren, una playa o un Hotel, tengo esa extraña sensación: vamos con la casa a cuestas.
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En definitiva, queremos que este viaje sea una prueba de que se puede viajar con lo puesto, tu ropa, tus zapatos y varias mudas. En Vietnam, y en Asia en general, hay muchas oportunidades para volver con más de lo que llevaste, y ese es otro atractivo del viaje.
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Eso sí, que nadie crea que llevar poca ropa significa no llevar nada: la lista de artículos del botiquín puede ser larguísima. Otro día hablaremos de eso.
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1 comentarios:

EEEESA SOY YO dijo...

Curiosamente además, cuanto mayores nos hacemos más nos cuesta desprendernos de nuestras cosas y más pesa nuestra maleta...¿cómo me voy a ir sin mi contorno de ojos?...¡¡Se puede!!.
Así que ánimo, a descartar cosas superfluas y a mantener sólo las importantes.